“Ahora está claro. Los discursos de Vance en Múnich y los tuits de Trump se han convertido en la doctrina de EE UU. Y debemos actuar de manera acorde”, asegura António Costa sobre el documento de seguridad nacional de Washington.
Europa despierta a la realidad de su divorcio con Estados Unidos. El presidente del Consejo Europeo, António Costa, ha cargado este lunes contra la nueva estrategia de seguridad nacional de la Administración de Donald Trump, que el pasado viernes se marcó como objetivo apoyar a las formaciones políticas ultras, euroescépticas y reaccionarias, a las que denomina como “fuerzas patrióticas”. “No podemos aceptar esa amenaza de interferencia en la vida política de Europa. EE UU no puede reemplazar a los ciudadanos europeos para elegir cuáles son los buenos partidos y los malos”, ha remarcado Costa en una intervención en una conferencia en el Instituto Jacques Delors, en París. Costa se refería al documento en el que el Gobierno de EE UU se proponía “cultivar la resistencia” para “ayudar a Europa a corregir su trayectoria actual”.“Los aliados no interfieren en la vida política ni en las decisiones políticas de sus aliados, respetan su soberanía”, ha zanjado el presidente del Consejo Europeo, el primero de la cúpula europea en pronunciarse —y muy claramente— sobre los embates de Washington a la Unión Europea. El lugar elegido tampoco parece casual. Jacques Delors, presidente de la Comisión Europea entre 1985 y 1995, jugó un papel clave en la creación del mercado interior, el euro y fue un ardiente defensor de la integración europea de la posguerra y arquitecto de la Unión Europea como la conocemos hoy.
Las palabras de Costa -antiguo primer ministro portugués y ahora presidente del Consejo Europeo, el órgano que define las prioridades políticas y la orientación estratégica de la UE al reunir a los jefes de Estado y de Gobierno de los Estados miembros- llegan tras un intenso fin de semana, en el que figuras políticas como los ministros de Exteriores de Francia, Jean-Noël Barrot, y de Polonia, Radoslaw Sikorski, eurodiputados o el ex primer ministro italiano Enrico Letta han defendido a la UE de los ataques de Washington.
Poco a poco, los líderes europeos que no lo habían hecho ya empiezan a digerir que, aunque en la teoría EE UU sigue considerando a la UE como aliado, su retórica y sus actos envían otro mensaje. “Ahora está claro. Los discursos del vicepresidente J. D. Vance en Múnich y los numerosos tuits del presidente Trump se han convertido oficialmente en la doctrina de EE UU. Y, por tanto, debemos actuar de manera acorde”, ha señalado Costa, que ha reclamado un compromiso reforzado con la construcción de una Europa que comprenda que las relaciones entre los aliados y las alianzas forjadas tras la II Guerra Mundial han cambiado.
El presidente del Consejo Europeo ha llamado a impulsar el mercado único y a abordar todas las preocupaciones de la ciudadanía europea, como la falta de una vivienda asequible. También a no quedarse replegada sobre sí misma y aprovechar la capacidad comercial que le da estar formado por 27 países y un potencial de 450 millones de ciudadanos que pueden ayudar a la Unión a forjar nuevas alianzas y mirar hacia otras zonas, como lo está haciendo al rubricar nuevos acuerdos comerciales con países como Indonesia o México. Si todo va según lo previsto, también lo hará con los países de Mercosur antes de final de año. Este pacto crearía la mayor zona de libre comercio del mundo.
También, ha zanjado Costa, debe asumir la necesidad de acelerar el paso para hacerse cargo de su propia seguridad, que ahora tiene externalizada a Estados Unidos. Esa dependencia de Washington debe reducirse. “Lo que está sucediendo también tiene consecuencias para nuestra seguridad y el correcto funcionamiento de nuestras Fuerzas Armadas”, ha dicho el mandatario, que ha remarcado que si Rusia comparte las doctrinas de la estrategia de seguridad de EE UU en lo relativo a Europa, como ha reconocido el Kremlin, eso ya debería dar una pista.
“Ya sabemos que Europa y Estados Unidos no comparten la misma visión del orden internacional. En Europa seguimos siendo defensores del multilateralismo, creemos en un orden internacional basado en normas, creemos en la ciencia, creemos en la libertad científica y no ignoramos desafíos globales como el cambio climático. Estados Unidos ya no cree en el multilateralismo, ni siquiera cree en el orden internacional basado en reglas y cree que el cambio climático es un engaño”, ha señalado Costa. “Tenemos diferentes visiones del mundo. Esta estrategia sigue considerando a Europa como un aliado, pero si somos aliados, debemos actuar como aliados”, ha dicho Costa, que ha pedido respeto a la vida política europea.
La nueva estrategia de seguridad nacional de Trump, que asegura que Europa, por su diversidad y políticas migratorias “se enfrenta a la desaparición de su civilización”, ha llegado acompañada de una intensa campaña anti-UE por parte de los tecnooligarcas del círculo del presidente de Estados Unidos, como Elon Musk, que han llamado directamente a abolirla después de que la Comisión Europea le multase con 120 millones de euros por falta de transparencia con la publicidad en la red social X (antes Twitter). El domingo, el dueño de X y de Tesla retiró a la Comisión Europea —que usa esa red social muy activamente para sus anuncios e incluso para difundir sus intervenciones en directo—la capacidad de gestionar su panel de control para la compra y seguimiento de anuncios.
Los mensajes de Musk, alabados además por rivales de la UE, como Rusia, siguen a un serio intento de chantaje de la Administración estadounidense, que ha reclamado a la UE que relaje sus reglas tecnológicas y de protección de datos a cambio de revisar su política arancelaria. “Estados Unidos no puede reemplazar a Europa en su visión de la libertad de expresión”, ha dicho Costa. “Nuestra historia nos ha enseñado que no hay libertad de expresión sin libertad de información. Y la libertad de información requiere el máximo respeto al pluralismo. Y, por tanto, no habrá libertad de información si alguien tiene el monopolio del software. No habrá libertad de expresión si se sacrifica la libertad de información de los ciudadanos para defender a los oligarcas tecnológicos de Estados Unidos”, ha zanjado el presidente del Consejo Europeo.
María R. Sahuquillo
Bruselas – 08 DIC 2025 – 12:02 CET fotoportada El presidente del Consejo Europeo, António Costa, en Bruselas el 26 de junio. Jonathan Raa (NurPhoto/Getty Images)




