El Intendente de Tacuarembó, Wilson Ezquerra, estuvo presente en el acto donde se encendieron las nuevas luminarias y recordó con emoción la historia del estadio, inaugurado hace 30 años. Destacó el trabajo incansable de directivas y familias que han mantenido vivo el espíritu del club y añadió que “el esfuerzo vale la pena, por el barrio, por los más pequeños, la camiseta y la historia”.
Por su parte, el presidente del club, Gabriel Acosta, expresó su gratitud a todos aquellos que hicieron posible esta mejora, destacando el esfuerzo conjunto de los vecinos, socios, jugadores, cuerpo técnico y del canchero que siempre que se necesitó estuvieron para ayudar.
«Contar con las luces era un sueño que teníamos y ahora se hizo realidad. Por eso también le agradezco al Intendente por su apoyo», manifestó.